Relato: Lujuria en Disneylandia





Relato: Lujuria en Disneylandia

LUJURIA EN DISNEYLANDIA



��BLOM!!. Cuando las puertas se cerraron, todos lanzaron un
suspiro de alivio. Algunos de ellos miraron a su alrededor para asegurarse de
que efectivamente estaban solos: no hab�a visitantes, ni ni�os con los gorritos
y los globos, ni padres que parec�an disfrutar m�s que los hijos, ni madres
obsesionadas por limpiar las manchas de dulce de la carita de su ni�o peque�o.
Reinaba una calma absoluta. Todos se miraron entre s� y la misma idea brill� en
ellos como llama centelleante en plena noche.



-��FIESTAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!.



Subieron al primer piso del castillo como una exhalaci�n,
sacando a toda prisa manteles y entremeses para abrir el apetito, dispusieron
una mesa donde colocarlo todo, pr�cticamente raptaron todos los cojines que
encontraron para acomodarse y se vistieron con la ropa m�s sencilla y de andar
por casa para estar lo m�s c�modos posible. Hasta que todo estuvo preparado y
dispuesto parec�a que un hurac�n andaba por el castillo de un lado para otro
revolvi�ndolo todo y poni�ndolo patas arriba. Una vez acomodados en la amplia
sala del primer piso, todos comenzaron de la forma m�s normal posible: comiendo
algunos de los entremeses, charlando un poco con los compa�eros, hablando de los
viejos tiempo y los nuevos�Si no fuera por un simple detalle, aquello podr�a ser
tomado por una agradable velada de fiesta de un grupo de amigos de cualquier
otra parte del mundo. �Eran dibujos animados!.



Por parte de las chicas estaban la joven y fantasiosa Alicia;
Aurora, la bella durmiente; Ariel, la pelirroja sirenita; Bella, la hija del
carpintero; la terrible bruja Mal�fica; la princesa de Arabia Jasmine; Wendy,
antigua habitante de Nuncajam�s; Mul�n, la mujer que se hizo pasar por hombre
para luchar en la china medieval; Kida, la princesa de la Atl�ntida de cabello
platino; Esmeralda, la gitana; Jane, la intr�pida reportera; Megara, la joven de
la antigua Grecia; Pocahontas, la guerra india de las grandes praderas;
Blancanieves, la amiga de los 7 enanitos, y Lilo, la ni�a hawaiana. Por parte de
los chicos estaban la terror�fica Bestia; Quasimodo, el deforme jorobado de
Notre Dame; Simba, el rey le�n; Golfo, el travieso perro; Baloo, Bageera y Rey
Lui, los animales de la jungla; Aladino, el ladr�n de Arabia; Neptuno, el dios
del mar; Peter Pan, el ni�o que nunca creci�; H�rcules, el semi-dios griego;
Tarz�n, el hombre mono; el diab�lico Jafar; Skar, el malvado le�n, y John Smith,
el colonizador ingl�s. Por supuesto faltaban algunos de los m�s emblem�ticos
personajes: Mickey, Minnie, Donald, Goofy, Chip & Chop, Robin Hood, Merl�n El
Encantador, los 101 D�lmatas y Cruela de Vil, Dumbo, los Aristogatos, etc., pero
tal era su grado de agotamiento, que les era imposible asistir a la fiesta, de
modo que se fueron a descansar para recuperar fuerzas y se durmieron apenas
llegaron a la cama. Por otro lado, ellos ya hab�an sido protagonistas de algunas
de las fiestas m�s salvajes y no ten�an pesar alguno por perderse �sta.



En un principio, todo pareci� de los m�s informal y
desenfadado: copas, ponche, charlas amenas�segu�an el mismo ambiente del
principio, salvo por un detalle: hab�a un juego de miradas entre todos,
esperando a ver quien daba la se�al de salida. Todos parec�an contener el
aliento, a la espera�y como no, tuvo que ser Blancanieves quien diera ese
pistoletazo cuando en sus caricias puso a Tarz�n en plena erecci�n animal y se
jal� toda la verga de �ste en su boca. El ambiente, por fin desatado, dio lugar
al tan deseado desmadre. Tarz�n, bien acomodado en un par de mullidos cojines,
se dej� hacer por la boca de la princesa, cuya cabeza bajaba y sub�a gozando de
la mamada que le estaba haciendo al rey de los monos. De todos era sabido la
obsesi�n que ella ten�a por �l debido al tama�o y grosor de su verga, que era
algo exagerado.



-Mmmm mmmmmm mmmm mmmmmmm�oooohh seguir as� princesa, comerla
toda�ooooohh Tarz�n gozar, gozar mucho�oooooooooh ooooooooohh ooooooohh
oooooooooohh oooooooohh ooooooooohh�



-Mm mmmm mm mmmmm mmmm mmmmm mmmmmmm�quiero sacarte todo tu
semen, quiero tragarlo�vamos rey de los monos, ponte salvaje�



-Aaaaaaahh aaaaaaahh aaaaaaaahh aaaaaaahh�Tarz�n querer
follar Blancanieves, Tarz�n querer que princesa griteeeeeeeeeeeeee�aaaaaahh
aaaaaahh�



La mano derecha de Blancanieves acogi� los huevos de Tarz�n y
los masaje�, logrando que �l se excitara much�simo m�s. Con la izquierda se la
cogi� con fuerza por la base, hizo presi�n con su boca y su lengua enroscada
alrededor de aquel dulce de verga y continu� propinando una felaci�n que le
estaba quitando la vida al poderoso hombro mono. Tarz�n baj� el vestido de ella,
haci�ndolo resbalar por los hombros y dej�ndola desnuda de cintura para arriba.
En cuanto le vio las tetas, coronadas por aquellos pezones grandes como cerezas,
se abalanz� sobre ella, pegando su boca a ellos, saltando de uno a otro,
pellizc�ndolos, jugando con uno y luego con otro. Se los apretaba con tanta
fuerza que le dol�a, pero aquel salvajismo la ten�a excitad�sima. Sus mejillas
ard�an de calor, la excitaci�n recibida era como una gigante electrocuci�n que
la atravesaba de parte a parte. La boca de Tarz�n baj� con lentitud hasta que su
cara qued� oculta entre sus piernas y su boca pegada a su pucha h�meda y
empapada.



-�AAAAAAAAAAAAAAAH!...aaaaaaahh aaaaaaahh aaaaaahh aaaaaaaahh
aaaaaaaaaahh aaaaaaaahh�mmmmmmmmm que bien, s�iiiiiiii�sigueeeee�



�l no habl�, si no que redobl� esfuerzos buscando el punto
sensible de la en aparente puritana princesa, hasta que al encontrarlo �sta
pareci� estallar entre gritos de placer, gritos que alentaron a los dem�s.



-Disculpa Bella, pero tengo que ir a por ella, no puedo
remediarlo.



-Anda vete, no te preocupes.



Bestia avanz� unos pasos hasta estar cara a cara con la presa
favorita de sus fantas�as y perversiones. Su rostro marm�reo e inocente era
irresistible para �l.



-�Quieres que me desnude para ti-pregunt� ella-?.



-S� Alicia, hazlo. Me gusta ver como te contoneas. Mu�vete
para ti.



La ni�a se levant� y mirando al que era su depredador sexual,
empez� a contonearse, a hacer golpes de caderas, a excitarse mientras se mov�a
de forma cada vez m�s insinuante, remoj�ndose los labios, acarici�ndose por
encima de la ropa, dibujando la silueta de su cuerpo, provocando en Bestia una
enorme erecci�n, cuyos pantalones parec�an reventarle. La ni�a se acarici� el
pelo quit�ndose la cinta que llevaba en �l, desliz� el mandil con mucha
suavidad, y con la sensualidad propia de su edad, acarici� sus nalgas desnudas
ante la cara de �l, el cual ya estaba fuera de s�. Alicia no pudo acabar el
baile: Bestia la cogi�, coloc�ndola sobre la mesa de los entremeses para
ense�arle lo que era todo un se�or cunnilingus.



-Aaaaaahh aaaaaaahh aaaaaahh aaaaaaahh aaaaaaahh
aaaaahh�Bastaaaaa, no puedo�s� mas suave�s� suave por favor�



-�NOOOOOOOOOO!...�SOY BESTIAAA!...��TE ENSE�AR� QUE NO ME
LLAMAN AS� POR CAPRICHO!!...



La lengua de Bestia penetr� a Alicia como si quisiera
reventarla. La furia y velocidad con que se mov�a por su panocha provocaba
intensos espasmos en aquella ni�a de cabellos rubios y ojos azules, ni siquiera
la dejaba recuperar el aliento. En cuanto Alicia vio la tranca de Bestia all�
parada, dura como una barra de acero, se le abrieron los ojos como platos.



-��De verdad quieres meterme todo eso??. La �ltima vez no
pudiste conseguirlo.



-��No puedo aguantar m�s!!...��Tengo que
follarteeeeeeeeeeeeeeeee!!...



La cogi� por los hombros tan fuerte que casi la abri� heridas
por la presi�n de las u�as. Apret� lo m�s fuerte que pudo su descomunal verga
contra la cuca de ella, haciendo constantes esfuerzos por conseguir su ansiado
objetivo de met�rsela. Tres, cuatro, cinco intentos hicieron falta hasta que,
con total satisfacci�n por parte de �l y dolor por parte de ella, consigui�
penetrarla, clav�ndosela bien hondo.



-��AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAARRGGHH!!...



-��AAAAAAAAAAAAAAH!!...��AL FIIIIIIIIIIIIIIIIIIIN!!...��VOY A
FOLLARTE ALICIA!!, ��QUIERO CORRERME CONTIGO!!...



Sin m�s palabras se puso a bombear dentro de ella como un
loco. El haber conseguido tenerla entre las piernas supuso la culminaci�n a
todas sus largas noches de fantasear con aquel dulce momento. Sin sac�rsela, se
sent� para que ella estuviese encima de �l y movi� las caderas para que ella lo
cabalgara. El balanceo de sus peque�as tetas lo excitaba terriblemente. Los
gemidos de Alicia mientras era follada a ritmo de diablo eran acompasados por
los de Blancanieves, que ya estaba siendo embatida por Tarz�n en el suelo, y
tambi�n por los de la peque�a Mul�n que, con las faldas abiertas, era lamida por
H�rcules con infatigable dedicaci�n. La chinita de ojos rasgados se encontraba
en el cielo y le encantaba ver la uni�n de oriente con el viejo mundo, le
apasionaba ver como aquel semi-dios la hac�a mojarse en jugos vaginales.



-Aaaaaaahh aaaaaaaahh aaaaaaaaaaaahh aaaaaaaaahh�ch�pame un
poco m�s, ch�pame�b�betelo todo goloso�



-Mmmmmm mmmmmmm mmmmmm mmm mm mmmmmmm mmmmmm mmmmmmmmm
mmmmmmm�no quiero dejar de beber nunca�esto es mejor que la ambros�a�



-Aaaaaahh aaaaaaahh aaaaaaaahh aaaaaaaaaahh aaaaaaaaahh
aaaaaaaaaahh aaaaaaaaaaaaaahh aaaaaaaaaaaahh�d�jame chuparte la polla�quiero
mam�rtela hasta los huevos�la quiero toda�



H�rcules obedeci� al instante, poni�ndose en pie para dejar
al descubierto 23 cent�metros de erecci�n que fueron engullidos por la boquita
de la oriental no sin algo de dificultad, pero al lograrlo, enrosc� la lengua
alrededor de ella como si fuera una serpiente con una liana, y los gemidos de
H�rcules eran casi apagados por los de Blancanieves, la cual estaba al borde el
orgasmo en su animal polvo con Tarz�n.



-Aaaaaaah aaaaaaaahh aaaaaaaaaaahh aaaaaaaaahh
aaaaaaaaaaahh�Me corro�me corroooooooo�AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHH�



-�Tarz�n a punto de correrseeeeeee!, �Tarz�n
correrseeeeeeeeeeeeeeeee! ��AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHH!!...



A pesar del cansancio del primer round, se dispusieron
a descansar unos minutos para un segundo asalto, aunque H�rcules y Mul�n a�n
estaban por el primero, con ella mamando todo el glande de �l, chup�ndolo como
una porra de fresa, meti�ndolo todo en la boca, sac�ndolo, volvi�ndolo a meter,
cada vez m�s fuerte, m�s fuerte�De improviso, H�rcules cogi� a Mul�n, la levant�
y sin moverse de su sitio, con la fuerza de quien ha nacido en la divinidad, la
penetr� y empez� a foll�rsela all� mismo, con ella sostenida solo por sus manos.
La escena, contemplada por todos, fue recibida con entusiastas aplausos por
Aladino, Peter Pan, Jafar y los dem�s, maravillados de ver como aquella chica
era penetrada sin m�s punto de apoyo que dos manos y una verga. La vulva de la
oriental recib�a con fuertes espasmos la poderosa polla de H�rcules, parec�a que
iba a perforarla de parte a parte. Cuando �l la penetraba la apretaba contra su
cuerpo lo m�s fuerte que pod�a, y al alejarse se la sacaba casi del todo,
volviendo a repetir la misma embatida de forma continua, acentuando una
penetraci�n profunda que la pon�a en el m�s puro �xtasis.



-Aaaaaaahh aaaaaaaahh aaaahh aaaaaaaahh aaaaaaaahh aaaaaaahh
aaaaaaaaaaaahh���H�RCULEEEEEEEEESS!!...��F�LLAME!!, ��VAMOS POTRO M�O,
F�LLAMEEEEEEEEEEEEEEE!!...



-��Ahh aaaahh aaaaahh aaaaaahh aaaaaahh!!...��as� te la
meto!!, ��as�, as�iiiiiiii!!...��que caliente eres, que cogida m�s
rica!!...��AAHH!! ��AAH!! ��AAHH!! ��AAAAAH!! ��AAAAH!! ��AAAH!! ��AAHH!!...



El atl�tico polvo entre ellos empezaba a cobrar m�s potencia.
Los movimientos de �l al penetrarla se hicieron muy secos, brutos, como si fuese
un hacha que quisiera partir un tronco en dos. Mul�n se dejaba hacer, era
incapaz de oponer resistencia a algo tan delicioso que le provocaba unos
sensacionales gemidos, aparte de tener todo su cuerpo al rojo vivo. A pocos
metros de ellos, Jasmine observaba la escena con un deleite absoluto, al tiempo
que ten�a entre sus manos la gran tranca de Neptuno, el padre de Ariel. �ste,
totalmente ido, estaba encantado por las caricias de la princesa �rabe, la cual,
como una verdadera experta, pelaba el manubrio del dios del mar arriba y abajo,
tom�ndose su tiempo para que �l disfrutara cada segundo, cada instante. Neptuno
abri� los ojos cuando escuchaba los tronantes gemidos de Mul�n y H�rcules.



-Aaaaaahh aaaaahh aaaaahh aaaaaaahh aaah aaaaahh aaaaahh
aaaaaaaaah aaaaaaaaaahh���RI�GAME, RI�GAMEEE!!...



-�Ooohh oooohh ooooohh ooooh oooh oooooh ooooooooh oooooooohh
ooooooh!...



-�Vamos, c�rrete ya!...�lo gozo, lo gozo!...��lo voy a
gozaaaaaaaaaaaarr!!...�AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHH!...



-OOOOOOOH S�IIIIIIII�YA, YA EST��OOOOOH OOOOOHH
OOOOOOHH�.��OOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOHH!!...



El orgasmo de Mul�n la puso en tal estado de extenuaci�n que
en cuanto H�rcules la solt� y se sali� de ella, �sta fue incapaz de moverse y
qued� tendida en el suelo. No todos los d�as uno pod�a descubrir lo que era un
"polvo divino". Animada por aquello, Jasmine continu� su paja para encender m�s
a�n la calentura de Neptuno. Si un polvo con un semi-dios era tan fuerte, ella
estaba deseando probar el polvo con un dios en toda regla. �l, desde luego,
capt� en seguida la intenci�n de su pajeadora.



-�Quieres probar el amor de los dioses?.



-No-contest� ella��Lo quiero todo!, �TODO!. Vamos dios del
mar, ens��ame todos los secretos de los oc�anos a esta princesa del desierto�



En comparaci�n, Jasmine parec�a una sombra al lado de la gran
figura de Neptuno, el cual la cogi� como si fuera una pluma y la dispuso bien
abierta para iniciar una comida de panocha que la hiciera gritar hasta los
confines del cielo. Su lengua juguetona empez� por las guindas de sus pezones,
uniendo fuerzas con los labios, los cuales besaban y succionaban de ellos como
si intentasen sacarles leche. La forma en que lo hac�a demostraba sin lugar a
dudas que era un dios.



-Ooooooohhh ooooohh oooohh ooooooohh oooohh ooooooohh���aaah
dios santo!!...��nunca me hab�a sentido as�iiiii!!...��si paras te
matooooooooo!!...



-Y esto es solo el principio, a�n no has visto nada.



Prosiguiendo aquel juego de lametones, la lengua subi� hasta
su boca para pegarle un fort�simo beso detr�s de otro, aguantando hasta los
l�mites de la asfixia. Luego de tomar un poco de aire retomaban largos besos,
acarici�ndose, desnud�ndose el uno al otro, hasta que, ya desnuda, las grandes
manos de Neptuno recorrieron todo el cuerpo de Jasmine, excit�ndolo,
calent�ndolo tanto para que acabara suplicando por qu� se la clavaran dentro lo
antes posible. Neptuno, sin embargo, como dios que era, supo aguardar y no
complacerla al instante. Todo lo contrari�, la puso el culo en pompa para
dedicarle un beso negro que la derriti� hasta el �ltimo rinc�n de su ser. Ella
jam�s hubiera imaginado que una parte tan oculta pudiera darle tanto placer, ni
que �l dominara la t�cnica con tanta maestr�a. Sabiendo que ella estaba a punto,
apunt� su polla hacia la entrada de ella.



-Vamos, p�delo Jasmine�.quiero o�rtelo decir�



-��F�LLAME NEPTUNO, F�LLAME YA!!...��REVI�NTAME, R�MPEME,
DESTR�ZAMEEEEEEEEEEEE!!...��M�TEMELAAAAAAAAA!!...



Sonriendo con un gran sentimiento de orgullo, Neptuno encul�
a Jasmine por sorpresa, haciendo que ella se resistiera e intentara sac�rselo de
encima.



-��AAAAAAAAAAAAAAAAHH!!...No, me dueleeeeeeeeeeeee�



-Solo doler� ahora, luego gozar�s, y luego te follar� como es
debido. Ya ver�s como disfrutar�s tanto que me pedir�s repetir.



-�NOOOOOOOOOO!...�S�calo, s�calo ya!...



-Nada de eso�Ya ver�s lo que bien que te va a hacer sentir�



Neptuno es qued� quieto unos momentos, esperando que ella se
relajara y dejara de gemir de dolor. Paulatinamente sus gemidos se apagaron
hasta hacerse inaudibles y qued� derrengada de espaldas sobre el pecho del dios
del mar. Amasando las peque�as pero apetecibles tetas de la princesa del
desierto, la apret� bien fuerte contra �l. En esa posici�n, su tranca inici� el
bombeo a ritmo de perforadora petrol�fera. La pasi�n que Neptuno sent�a por el
sexo anal era sobradamente conocida, lo mismo que su delirio cuando lo
consegu�a. Jasmine se sent�a ultrajada mientras la enculaban, pero tantas
sensaciones estaban teniendo que le era imposible no gozarlo.



-Ahh aaaaahh aaaahh aaahh aaahh aaaaahh aaaaaahh aaaaaahh
aaaaahh aaaaaaaaahh�dame dame dame�uuuuufff que gozadaaaaaaaaaaaaaaa�



-Jajajajajajaja�.ya te dije que gozar�as�



-�S�iiiiiiiiiiiiiiiiiiii!...�f�llame el culo,
revi�ntamelo!...�r�mpeme el anooooooo!...�AAAHHH AAAAH AAAHH AAAAHH!...



Neptuno hizo ponerse a Jasmine a cuatro patas, y en esa
postura se entreg� totalmente a abrirle el orto a marchas forzadas como quien
busca desesperadamente un tesoro enterrado. El dolor desapareci� y el placer la
regaba por todo su cuerpo: estaba maravillada como nunca de que la estuviesen
dando por el culo, algo que no hab�a dejado hacer ni a Aladino, su propio novio.
�ste, que con perversa sonrisa contemplaba como a su prometida le hac�an lo que
�l no hab�a podido, se deleitaba la vista recre�ndose con aquella escena,
mirando de reojo mientras ten�a su cabeza enterrada entre los morenos muslos de
Pocahontas, y su lengua probando los fluidos que le sal�an como agua de
manantial.



-Mmm mmm mmmm mmmm mmmmm mmmmmmmm�est�s empapada...casi vas a
inundarme con ellos...pero que rico saben...mmmm mmmmm mmmmm...



-Aaaaaahh aaaaaaaahh aaaaaaaaahh aaaaaaaahh
aaaaaaaahh...ens��ame los placeres de oriente Aladino...ens��amelo
todo...aaaaaahh aaaaaahh aaaahh...



-Y t� ens��ame el placer de los guerreros de las
llanuras...quiero que me montes y me cabalgues como a los caballos salvajes...



Las mejillas de la india parec�an un sem�foro atascado en
rojo. Como ladr�n que era, Aladino estaba rob�ndole sus fluidos de tal manera
que con la m�s m�nima caricia todo su ser temblaba de goce. La punta de la nariz
le hac�a cosquillas en su pubis y de vez en cuando chocaba con su cl�toris, el
cual provocaba en ella enormes convulsiones. Besos, lametones, m�s besos,
chupadas, mordisqueos...nunca se encontr� con alguien que supiera hacerlo
aquello tan bien. Abriendo los ojos tanto como pudo, gir� un poco a la cabeza y
vio a Neptuno enculando a Jasmine, la cual solo pod�a gemir como una perra en
celo. La enculada antes no deseada ahora era lo �nico que quer�a.



-�Aaaaahh aaaaahh aahh aaaaaaaahh aaaahh aaaaaaaaahh
aaaaahh!...�M�S ADENTRO, M�AAAAAAAAS!...



-�Espera, que a�n falta lo mejor!...�Ahora ver�s el verdadero
poder de los dioses!. �AHORA CONOCER�S EL PLACER DE LOS DIOSES!.



Justo debajo de la polla de Neptuno apareci� una
protuberancia que creci� y creci� hasta que �se convirti� en otra polla!. �sta
se clav� directamente en la chorreante vulva de Jasmine, que la acogi� con
terribles estertores de placer.



-��Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaahh!!...��Uuuuuummmmmm!!...��me
gustaaaaaaaaaaa!!...��OOOHH DIIIIIOOOOOOOOOOOOSSSSS!!...



La doble penetraci�n no solo posterg� el orgasmo que se le
avecinaba, si no que elev� las cotas de placer a niveles muy superiores. Las
embatidas eran infernales, abrasadoras. Era el mejor polvo de toda su vida:
�follada a dos bandas por un dios con dos pollas!.



-��F�LLAME AS�, AS�IIIIIIIIIIIIIIIIIIIII!!...oooohh dios que
gozadaaaa..me corroooooooooo..me corro toda AAAAAAAAAAAAAAARGGHH...



-OOOOHH OOOHH OOOOHH OOOOOHH OOOHH
OOOOOOHH...��OOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOORRGHH!!...



Grandes chorros de semen inundaron culo y co�o de la princesa
del desierto. Satisfecho de haber podido hacer lo que quer�a con ella, se
dispuso a reposar, pero pronto recuperar�a fuerzas. No era as� con ella, que
estaba dolorida en su orto despu�s de tanta embestida de animal enloquecido. Lo
�nico que pod�a hacer era mirar como Aladino se pon�a en el suelo para que
Pocahontas se clavara su polla al cabalgarle.



-Ahh aaaahh aaaaaahh...uuummm...ya entra...aaahh ahh
aaaaah...uuuuuuff que dura est�....aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaah-suspir� al notar
que hab�a entrado-...



-Oooooooohh que ardor Pocahontas...tienes fuego en tu
interior...



-Pues voy a abrasarte con �l: ahora prep�rate, �que vamos
galopar!.



Aladino llev� las manos a las tetazas de ella para sujetarse,
con los pezones colocados entre los dedos, con las u�as clavadas en sus
calientes carnes, lo que hizo a ella lanzar un gemido de dolor. Al mirarlo, lo
hizo con cierta malicia, y sin m�s palabras, lo cabalg�. Lenta al principio, su
ritmo fue creciendo sin prisa pero sin pausa hasta convertirse en algo
desbocado. �Parec�a como si domase un potro salvaje!.



-Oooh ooh oooh ooohh oooohh ooh oohh ooohh ooohH
oohh...��arre caballo!!...��ARREEEEEEEEEEEE!!...



-UUUFFFFFFFFF...aaaaahh aaaaaahh...m�s suave, m�s
suaveeeeeee...ME EST�S MATANDOOOOOOOOOOOOOO...



Ella no le o�a, estaba absorta, perdida en su mundo de
placer. No le importaba que �l se quejase de la brutalidad de la que ella hac�a
gala al follarlo. Su �nico deseo era correrse cuanto antes mejor. Necesitaba
gozar, gritar, desgarrarlo a mordiscos. Los gritos de �l eran si cabe m�s
fuertes que los de ella.



-Oooooh ooooohh oooooooohh ooooooohh ooooooooohh...rica
verga...sabrosona...me vuelve loca, �LOCAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!...



-�AAAAHH! �AAAHH! �AAHH! �AAAHH! �AAH! �AAAAAHH! �AAHH
AAAAHH! �AAAH! �AAHHH! �AAAAHH!...



-MMMM... OOOHH OOOH OOOHH...MMMMMM...��M�S, M�AAAAS,
M�AAAAASS!!...��M�AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAASSS!!...



-NO PUEDO M�AAAS���AAAAAAAAAAAAAAAAAAARRGH!!...



Tan fuerte lo cabalg� que por un instante pens� que lo iba a
matar debido a los fort�simos golpes de caderas con los que lo arremet�a. Su
polla bien estrujada por sus m�sculos vaginales eyacul� con chorros potentes y
ella reg� copiosamente con sus fluidos sobre la verga de �l. Qued� en un estado
de agotamiento que le resultaba incomprensible para un solo polvo, mientras que
Pocahontas ya estaba intentando reanimarlo para volver al ataque. El ambiente,
totalmente desmadrado, no hizo m�s que empezar, pues Esmeralda y Ariel, amigas
en la pr�ctica pero rivales en lo sexual, se estaban mirando con fuego en sus
ojos. Ninguna apartaba la vista de la otra a la vez que estaban escudri�ando de
reojo a los presentes buscando alguien a quien excitar para mont�rselo por todo
lo alto. Fue Ariel la que encontr� lo que buscaba, y Esmeralda, no queriendo ser
menos, busc� lo m�s parecido para hacerle la competencia.



-Uuuuuuummmmmmm�me excitas mucho Bageera, me gustan los
animales de la jungla�ven aqu�, que estoy ansiosa de saber lo que es la pasi�n
animal�



-Soy todo tuyo pelirroja�



Bageera se ech� en el suelo y Ariel le acarici� la cabeza y
se la rasc�, para seguir acarici�ndole el cuerpo, desplazando sus manos por su
lomo, girando para rascarle el pecho y bajar, de manera muy sensual, entre sus
patas traseras. A base de caricias y toda clase de manoseos, una enorme pija
rojiza sali� de su forro natural. Ariel qued� extasiada al contemplar aquel palo
carnoso, y con mucho esmero lo toc� con sus dedos, sintiendo el enorme calor que
desprend�a, regode�ndose de ver como la pantera se dejaba hacer y de imaginar lo
mucho que disfrutar�a cuando la penetrase. Por su parte, Esmeralda ya estaba
haciendo lo mismo con Simba pero con un paso de ventaja, pues �sta ya ten�a la
leonina verga de �l en su boca.



-Mmmmm mmmmm mmmm mmmmm mmmm mmmmmmmmm�que boquita m�s
caliente y jugosa�y que bien chupaaaaaaa�m�mamela m�s fuerte���m�s
fuertee!!...no pares Esmeralda�oooooooooohh ooooooohh oooooooooohh�



-Me fascinan los animales�adoro foll�rmelos�y ahora tendr�
para m� sola al rey de la selva�mmmmmmmmmmmmm que delicia de pija�est� dur�sima�



Viendo que le estaban ganando terreno, Ariel imit� a su
competidora engullendo la verga de Bageera para empaparla en saliva,
prepar�ndola para que se deslizase con facilidad cuando llegase el ansiado
momento en que la follase como a la animal que era. Ambas mujeres pugnaban por
demostrarse a la otra quien era la mejor en materia sexual, y estaban dispuestas
a todo. Los rugidos de Bageera y Simba, si bien pod�an asustar a algunos, a
ellas solo les produc�a un escalofr�o de placer que recorr�a su espalda y
llegaba a todos los rincones de sus cuerpos excitados. Esmeralda se abri� de
piernas para meterse mano, acarici�ndose sus labios vaginales, meti�ndose un
dedo, moj�ndolo con sus jugos, que despu�s dio a probar a su amante. �ste, tras
olerlo y probarlo, se enderez� un poco y esper� que ella se le ofreciera. Se
abri� de piernas cuanto pudo y maravillada contempl� a Simba acerc�ndose,
sacando la lengua, para pasarla por su labio vaginal. El solo sentirla la
desarm� por completo.



-Aaaaaaahh aaaaaaahh aaaaaaaaahh aaaaaaaahh
aaaaaaahh....uuuuuumm que rico que esto�oooooooooh por dios que goce�l�meme toda
rey le�n�no pares de lamermeeeeeeeeeeeeeeee�oooooooooohh oooooooohh oooooohh
ooooohh�



Durante varios minutos tanto Ariel como Esmeralda estuvieron
de piernas abiertas, lamidas a lo largo y ancho de sus vulvas empapadas de
saliva de pantera y le�n respectivamente, jadeando, retorci�ndose, regocij�ndose
en el oc�ano de sensaciones que aquellas lenguas grandes y rasposas provocaban.
Sin planearlo, las dos se pusieron a cuatro patas al mismo tiempo, mirando hacia
ellos, ansiando que las montasen. Bageera primero, Simba despu�s, los dos se
subieron a la grupa de las mujeres, chocando sus vergas con las respectivas
vulvas. �stas, a pesar de la excitaci�n recibida, no dejaban que aquella
ardiente masa de carne entrase con facilidad y tuvieron que empujar para lograr
met�rselas, siendo Ariel la vencedora en este punto.



-�AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHH!...��OOOOOOOHH DIOOOOOOSS QUE
DOLOOOOOOOOOOOOORR!!...��AAAAAAAAAAAAAAAAHH!!...



Se le escapaba la saliva como si estuviese atragantada. Solo
pod�a gemir y jadear a partes iguales, con su cuerpo movi�ndose de un lado a
otro mientras la pantera de la jungla la estaba penetrando con su ardor animal.
Esmeralda, por su parte, ni siquiera pudo esbozar palabra alguna, si no que se
limit� a gritar al sentir como su cuerpo era casi reventado. Casi por instinto
llev� sus manos a un peque�o muro delante de ella para aguantar la tremenda
embestida, dej�ndolas all� para soportar el peso del rey le�n.



-Mmmmmm mmmmm mmmmmm��Ooohh! �oooooohh! �oooooohh! �oooohh!
�ooooooohh!...



-AAAAHH AAAAAAHH AAAAAAAHH�s�, s�iiiiiiiiiiiii��no quer�as
que te follara, sirenita?...di que te gusta, �DILO!...



-�S�IIIIIIIIIIIIIIIIIII!...f�llame Bageera�Met�mela,
perf�rame, pen�trame, emp�lame una y otra vez�me corro toda AAAAAHH AAAAAAHH
AAAAAHH�



-�Y t�, gitana?, �te gusta que te empale?, �te gusta sentir
como te reviento por dentro?...



-S�IIIIIIIIII ME GUSTAAAAAAAAAAAA-contest� Esmeralda con los
ojos llorosos-�vamos Simba�m�s fuerte, m�s, m�s, m�s�VI�LAME,
FU�RZAMEEEEEEEEEEEEE�



Ambas mujeres, perdidas en los placeres de la zoofilia,
estaban en pleno frenes� sexual, al borde del delirio m�s absoluto. Con la cara
totalmente enrojecida medio por la verg�enza medio por la excitaci�n, Wendy
Moira �ngela Darling se alej� de Peter Pan, con quien acababa de echar un polvo,
y con cierta timidez se acerc� a Golfo, el simp�tico perro vagabundo. �ste,
viendo la intenci�n de la ni�a, dej� de Dama para ir con ella.



-�Te gusta verlo Wendy?, �te gusta ver lo que ellas hacen?...



-Me excita mucho�me da ganas de probarlo, pero me da miedo�



-No te preocupes, yo soy m�s manso que Bageera y Simba, y si
quieres har� que tiembles por los cuatro costados�har� que te retuerzas en el
sitio de tanto placer�



-Vale.



Sac�ndose totalmente el camis�n que llevaba(y que no necesit�
quitarse para mont�rselo con Peter), se qued� desnuda, sentada, con Golfo a su
lado pasando su lengua por sus tiernos pezones, haciendo que se marcasen cada
vez m�s. La durez que alcanzaron fue enorme, parec�a como si se hubiesen
convertido en piedra. Al tiempo que Esmeralda, Ariel y Wendy se deleitaban con
los placeres de la zoofilia, Bestia ya hab�a acabado de follarse a la inocente
Alicia y estaba en plan salvaje con Mul�n, H�rcules y Aladino estaban con Bella
mont�ndose un tr�o mientras que Pocahontas y Neptuno se lo montaban a todo
trapo. Volviendo a las tres zoof�licas, Wendy se estaba preparando para sentir
la gran penetraci�n de Golfo, a la vez que Ariel y Esmeralda estaban cerca de
saber quien era la mejor, pues ambas estaban a punto de correrse.



-Mmmmm mmmmmmm mmmmmmm mmmm mmmmm�oooooohh oooohh ooooohh�no
puedo m�aaaaaaaaass�ya, ya viene�ya vieneeeeeeeeeeee�



-Yo tambi�n...me corro�ya me corro�me voy a
correeeeeeeeeeeer���AAAAAAAAAAAAAAAAAARRGHH!!...



Ariel, por pocos segundos, venci� a Esmeralda, la cual qued�
frustrada por haber perdido, pero tremendamente satisfecha de recibir semejante
polvo. Se cruzaron miradas de odio a lo primero, pero luego eran miradas de puro
placer. Sus respiraciones eran fuertes, r�pidas, el sudor ba�aba sus cuerpos y
sent�an que las fuerzas las hab�an abandonado con cada espasmo de su cuerpo
fruto de los poderos�simos orgasmos que hab�an tenido. Wendy, que estaba
dej�ndose hacer por Golfo, se encontraba abierta de piernas para que Golfo
probara su h�meda y caliente vulva, y Aurora, la bella durmiente, se acerc� al
simp�tico y bonach�n Rey Lui.



-Oye, �puedo preguntarte una cosa?.



-Adelante, larguirucha. �Qu� te ronda esa cabecita?.



-�Una mujer puede mont�rselo con un mono?.



-Lo mismo que tus amigas con un le�n, una pantera y un
perro-ironiz�-.



-Pues me han entrado ganas de probar con un mono, y como aqu�
no hay nadie m�s��te hace?.



-Consid�rate penetrada.



Aurora se sent� con las piernas cruzadas y Rey Lui se puso en
su regazo. Tras abrazarse llegaron los besos, largos y con lengua. La diferencia
entre ambas era muy notable, y aunque a Aurora le sab�a raro, tambi�n es cierto
que le excitaba el tacto y sabor que ten�a. El roce del pecho velludo del
orangut�n contra el de la princesa medieval fue tambi�n excitante para ella.
Toda aquella experiencia, de principio a fin, estaba poni�ndola muy caliente.
Bes�ndose con el simio mir� de reojo y vio que Wendy se estaba poniendo a cuatro
patas.



-��Espera!!. Esto quiero verlo. Necesito ver como la penetra.



Se pararon de besar y quedaron mirando la escena. Con cierto
miedo, Wendy miraba a Golfo, el cual le pasaba la lengua por su vulva un poco
m�s dejarla bien mojadita, a fin de no hacerle demasiado da�o. Cuando vio que
estaba preparada, se subi� encima de ella con su pija preparada para entrar.



-Rel�jate Wendy, que all� vamos. Rel�jateeeeee�



-Ooooooohh�oooooooohh que grandeeeeee��aaayy aaaaaay
aaaaaaaaaayy aaaaaaaaaayy!...�AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHH!...



-MMMMMMMMMMMMMM�ya est� dentro�OOOOOOOOHH que caliente est�s
Wendy�que ardor�



Acogida con fuertes convulsiones, la verga de Golfo se
acomod� bien dentro de la ni�a. Durante unos instantes permanecieron quietos,
dejando que ella se acostumbrase a tener algo tan grande en su peque�a vulva.
Para �sta era incre�ble: sent�a que le llenaba toda la cuca, toda sin excepci�n.
Sin avisar, de forma lenta pero firme Golfo mene� las caderas, lo que se tradujo
en un leve bombeo que empezaba a gustarle. �Ya se la estaba follando!, y que
bien se sent�a. Era una sensaci�n maravillosa que pronto se convirti� en un
arrebato, pues la cogida subi� de tono con rapidez y Golfo la bombeaba con todas
sus fuerzas.



-�AAHH! �AAAHH! �AAHH! �AAAAAHH! �AAAAHH! �AAAHH! �AAAAAHH!
�AAAAHH! �AAAHH! �AAAAHH! �AAAHH!...



-AAAAAAAUUUUUUUUUUUUUUU�est�s riqu�sima Wendy�Quiero
hac�rtelo cada d�a, a cada hora�aaarrff aarrff aaarff aaaarrff aarffff aarrf
aarff�no sab�a que esto fuera tan bueno�



Metidos en faena, Wendy se entreg� completamente a aquellas
indescriptibles sensaciones que la estaban llevando a toda velocidad a la
locura. Aurora, extasiada, continu� con Rey Lui sus avances, acercando sus tetas
a la cara de �l para que tuviera acceso total a sus pezones, al tiempo que sus
manos bajaban buscando su erecci�n para sentirle en sus manos y mantenerla �
aumentarla si es que eso fuera posible. Lanz� un suspiro de sorpresa al notar
que era grande, m�s que la de un hombre, m�s que la de su amado pr�ncipe. Se
relami� pensando en cuando la tendr�a en su pucha penetr�ndola, y jade� al ver
lo bien que Rey Lui la estaba chupando las tetas.



-Que bien me chupas los pezones�aaaaaaaaahh que bien�pasa la
lengua, p�sala por ellos�s�, s�iiiiiiiiiiii�uuuuuuuuufff que ricoooooooo�vamos
monito lindo, hazme lo que t� quieras�



Se ech� a la larga y qued� muy quieta para que �l la tuviera
a su entera disposici�n. Sinti� unos dedos bajando por su vientre hasta colarse
entre sus piernas, toc�ndola, excit�ndola, calent�ndola con cada gesto, con cada
roce. Le mir� y se puso caliente pensando en lo viciosa que era por dejarse
follar por un orangut�n. Estaba a punto de reventar.



-��LUI!!. ��F�LLAMEEEE!!...��QUIERO QUE ME FOLLEEEES!!.



-�brete bien, que voy a empalarte tanto que te la sacar� por
la boca.



Aurora lo hizo muy obediente y Lui intent� penetrarla, pero
no era f�cil met�rsela. Sus esfuerzos previos fueron infructuosos, pero no
desisti�. Redobl� sus intentos hasta que, por fin, fue entrando lenta y
dolorosamente, hasta que al final la penetr� del todo. Aurora pens� que iba a
morirse de solo sentir que ya se la hab�a metido, crey� que efectivamente aquel
ariete iba a partirla en dos, a desgarrarla. Cogi�ndola por los hombros, Lui
perdi� el control de s� mismo debido a la sobreexcitaci�n y penetraba con tanta
fuerza que ella siquiera pod�a pensar con claridad y mucho menos ten�a tiempo de
acomodarse como quer�a.



-F�llameeeeee, f�llame vivaaaaaaaaaaaa�no te pares, sigue�m�s
fuerte, �M�S FUERTEEEEEEEEE!...me has llenado de ti, me tienes cachonda mono
cabr�n�AAAAAAAHH AAAAAAHH AAAAAAAAHH AAAAAAHH�



-Que hembra m�s caliente�que delicia��te gusta mi polla
dentro de ti?, �te gusta?...



-�S� QUE ME GUSTA!, �ME ENCANTA, ME DESTROZA, ME PARTE, ME
ROMPE EN DOS, ME DESGARRAAAAAAAAAAAAAAAAAA!...



La fuerza de tal penetraci�n hac�a que ambos se convirtieran
en dementes sexuales en do mayor. Uno que era incapaz de contenerse, y una que
no pod�a parar de pedir m�s. Ariel, tumbada en el suelo, miraba aquello mientras
unos dedos juguetones que ella conoc�a bien la hurgaban y unos labios la
besaban.



-�Te ha gustado el polvo con Bageera?.



-S�, me ha encantado. Me he corrido por todos los poros de mi
piel.



-�A�n te quedan fuerzas para m�?.



-Siempre tendr� fuerzas para ti Bella.



Mont�ndose un show l�sbico ambas se entregaron a la b�squeda
de placeres en todos los rincones de sus cuerpos, mientras Aurora segu�a siendo
montada a velocidad de v�rtigo por Rey Lui. El polvo estaba llegando a su final
a tenor de los chillidos y gemidos de uno y otro, parec�a que fueran a explotar
por los aires. No lejos de all�, perdidos en su nube de maldad, la ac�rrima
enemiga de Aurora, la diab�lica reina Mal�fica, estaba pas�ndolo mejor que nunca
con Jafar, en una sesi�n de sado, ambos vestidos en l�tex y cuero negro. Ella le
hab�a obligado a �l a lamerle los zapatos y lo azotado con l�tigo, si bien luego
le hab�a cogido la verga con tanta fuerza que le doli�. �l tambi�n la sodomiz�,
meti�ndole dos enormes vibradores, uno de estr�as y otro de acero galvanizado,
el primero por su orto y el segundo por su panocha. Poco despu�s, Jafar ya la
ten�a arrinconada contra la pared, penetr�ndola como si la estuviese violando.



-�AAAHH AAAHH AAAAHH AAAHH AAAAHH AAAHH!...�Toma, toma
verga!...�Toma, perra!, �PERRA, QUE ERES UNA PERRA!...



-�OOOHH OOOOHH OOOOOHH OOOOHH!�dime m�s�vamos, ins�ltame
m�s�revi�ntame, vi�lameeeeeeeeeeee�



-�Puerca!, �furcia!, �hija de puta!, �te voy a desgarrar, a
violar por todos tus agujeros!...��TOMA MANDOBLAZO DE POLLA!!...



Todos sab�an que si ambos se pon�an en ese plan, lo mejor era
dejarlos a su aire, pues riesgo se corr�a de sufrir algunas de las torturas que
a ellos les gustaba tanto darse el uno al otro. Wendy por fin se hab�a corrido y
lo hizo entre colosales exclamaciones de placer al correrse y notar como varios
chorros semen caliente la regaban por dentro. Tras un leve descanso, se dio ella
misma unos cachetes y le pidi� otro polvo a Golfo, ansiosa por repetir
experiencia. Aurora, a�n bien penetrada con Rey Lui, ya estaba sintiendo la
llegada del inminente cl�max.



-�Dios m�oooooooooo! �Luiiiiiiiiiiiiiiiiiiii!...�C�rrete
conmigo mi amoooooor!...�c�rreteeeeeeeeeeeeeeeee!���YAAAAAAAAA!! ��AAAAAAAAAAAA
AAAAAARGGGHH!!�



-��ME VENGO ME VENGO ME VENGOOOOOOOOOOOOOOOOOO!!...



El orgasmo lleg� acompasado de un cansancio cuya mezcla fue
explosiva. Algunos de los invitados ya estaban fuera de combate, pero otros,
como Peter Pan, a�n ten�an fuerza, y tras contemplar con gesto divertido como su
novia se inici� en la zoofilia, fue hacia una mujer que particularmente le
obsesionaba por su belleza.



-�Has probado a follar en pleno vuelo?. Solo necesitas polvo
de hadas, un pensamiento alegre y un polvo de los buenos�



-Mmmmmmmmm�me gusta esa idea��pero no habr� riesgo de
caernos?.



-Creo que m�s bien el riesgo ser�a subir tan alto que luego
no pudi�ramos bajar.



Cenicienta se ri� por ello y asinti� con la cabeza. Peter la
ech� por encima su polvo de hadas, y esper� que hiciese efecto. Tras desaparecer
los brillos, ambos se besaron y acariciaron, desnud�ndose lentamente, dejando
que su calentura fuese entrando de manera paulatina. Conforme eso fue
sucediendo, ambos se fueron elevando en el aire, sin dejar de tocarse ni un solo
instante. Megara, con el ce�o fruncido, viendo el espect�culo de unos y otros,
vio que necesitaba de algo parecido, algo que la hiciese gozar tanto que se
corriera de pies a cabeza. Mir� a unos y otros y entre la gente distingui� al
que se la follar�a, de modo que fue con �l, sent�ndose a su lado y sac�ndole la
tranca de los pantalones sin siquiera preguntar nada.



-�Cu�nta fuerza tienes-pregunt� ella-?.



-�Cu�nta necesitas-repuso �l-?.



-La necesaria como para follar all�-se�al� a un punto elevado
en una cuerda-.



-Eso es un poco complicado, �no te parece?.



-Pero t� est�s acostumbrado a eso, �verdad, Quasimodo?.



�ste mir� hacia arriba, comprobando si pod�a realizarse, y
luego le dijo un rotundo "s�" a Megara. �sta, sin m�s dilaci�n, se meti� la
polla de �ste en la boca y chupaba como ansiosa de ella. A su vez, Peter Pan y
Cenicienta estaban en pleno 69 a�reo, ambos comi�ndose al otro con fruici�n.
Cenicienta vio que aquel ni�o que nunca crec�a, a pesar de su tama�o, ten�a una
verga de buen tama�o y muy sabrosa, y Peter Pan sonri� con malicia degustando
los jugos de ella, viendo que estaba empapada. Se desplazaron un poco hasta el
techo, apoy�ndose con las manos para no chocar de cabeza. El 69 era incre�ble
para ambos: no se cansaban de chupar y lamer. Megara, mirando un poco hacia
arriba, contemplando aquello, se desnud� delante de Quasimodo, contone�ndose de
forma sugerente, yendo hacia la cuerda y jugando alrededor de ella como si fuese
una barra de un local de strip-tease.



-Vamos nenito, vamos a echar un polvo en las alturas. �O no
quieres follarme?.



-La duda ofende-contest� divertido-.



Fue con ella, la bes� y la sob� por todas partes. No dej� un
cent�metro de ella que no acariciase, chupase � lamiese como un baboso. Apret�
con fuerzas sus nalgas, la acerc�, apret� contra �l, la estaba metiendo mano sin
darle un segundo de descanso y a Megara eso le encantaba. Sus besos se hac�an
m�s apasionados, sus manoseos ganaron en rapidez. Ella busc� otra vez la verga
de Quasimodo, d�ndola vueltas, mene�ndola, toc�ndola con los dedos, sintiendo la
durez y el calor que emanaban de ella. Peter Pan, en el techo de la habitaci�n,
ten�a a Cenicienta preparada para �l: desnuda, abierta, bien mojadita�Se puso
entre sus piernas, la ensaliv� un poco m�s, y la penetr�. Su miembro se desliz�
suavemente y sin problemas, arranc�ndole prolongados suspiros de placer. Una vez
asegurada la penetraci�n y agarr�ndose bien fuerte a una columna, el ni�o que
nunca quiso crecer se relami� al tiempo que se estaba follando a Cenicienta.



-Esto es delicioso, nunca hab�a probado nada igual�Peter,
m�temela hasta el fondo, sin piedad�m�tela toda�uuuuummmmmmmm�eso es,
as�iiiiiiii�ooooohh que gustooooooooo�aaaaaahh aaaaaaahh aaaaaaaahh aaaaaahh�un
poco m�s fuerte, m�s fuerteeeeeeeeeee�AAAAAAHH AAAAHH AAAAHH�



-Est�s impresionante Cenicienta, est�s abierta del todo�Dios
m�o, esto es un pozo sin fondo�Voy a perforarte hasta sacar petr�leo�me vuelves
loco�me encantan las rubias�son m�s fogosas�oooooh ooooohh oooohh oooooooohh
ooooohh�



Peter Pan, mientras se follaba a Cenicienta con toda su
lujuria, observaba de vez en cuando como Quasimodo, con Megara sobre su hombro,
sub�a por una cuerda hasta quedarse en ella bien sostenido. Ella, desliz�ndose
por �l, se puso frente a frente, cruzando las piernas por la cintura, para luego
bajar, penetr�ndose ella sola hasta donde su panocha diera de s�. Agarr�ndose
tan fuerte como pod�a, Quasimodo pudo poner la cuerda alrededor de su mu�eca
para aguantar bien, despu�s rode� a Megara con el otro brazo y en ella
acrob�tica postura se dispusieron a follar. Para incrementar su excitaci�n, le
meti� un dedo en su ano, luego otro, activando en ellas resortes secretos de
placer que la hicieron gemir como una posesa.



-��AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHH!!...ooooooohh que polvo, me
vuelvo loca...que morboooooooooooo�dame fuerte papi, dame duro�voy a correrme
tanto que parecer� que se ha puesto a llover�aaaaaaaaahh�mmmmmm mmmmmmm mmmmmmm
mmmmmmmm�



-��Venga, c�rrete Megara!!...eres una perra insaciable�estaba
deseando poder tenerte entre mis piernas�te he visto saltar de uno a otro esta
noche�pensaba que nunca vendr�as por m�



-Pues ya me tienes�soy toda tuya�y ahora para de hablar, y
f�llame���F�LLAMEEEEE!!...AAHH AAAHH AAAAAHH AAAHH AAAAHH�



-�OOHH! �OOH! �OOOHH! �OOOOOHH! �OOOOHH! �OOOHH! �OOOOH!
�OOOHH! �OOOOOOOOHH!�



Quasimodo en la cuerda y Peter Pan en el techo, ambos
arremet�an contra sus chicas con furia visigoda, usando sus vergas como arietes
que si tratasen de reventarlas. Tanto uno como otro estaban en situaciones algo
delicadas, pero eso a�ad�a un toque de peligro que hac�a aumentar el morbo a
pasos agigantados.



-No puedo m�s Cenicienta�me voy a correr�goza conmigo, goza
ahora�oooohh oohh oooohh ooooohh oooohh oooohhh�



-Espera un poco, a�n no estoy�dame m�s fuerte, apri�tame
bien...�eso es!, ��AS�!!...aahh aaaaahh aaaaaahh aaaaaahh�EMPUJA M�S
FUERTEEEEEEE�



-Ya no puedo m�aaaaaaaass�no puedooooooo�me
corroooooooooooooo���OOOOOOOOOOOOOOOHHH!!...



-S�, SI, ��S�IIIIIIIIIIIIII!!...siento que me
vieneeeeeeeeeee�AAAHH AAAAAAAHH AAAAAAAAAAHH AAAAAAAAAAAAAAHH�



Varios chorros de lefa se descargaron dentro de Cenicienta,
que a su vez chorre� sobre la polla de Peter Pan. Tras aguantar todo lo que
pudieron, comenzar a descender lentamente hasta unirse con los dem�s, y miraron
como Megara y Quasimodo tambi�n estaban pr�ximos a gozar.



-Megara, �Megaraaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!...ya me
viene�me voy a correr dentro�voy a regarte por dentrooooooooooooo�



-�Ri�game!...�no te detengas, sigue
d�ndome!...�RI�GAMEEEEEE!...



-Aaaaah aaaahh aaaahh aaahh aaaah�AAAAAAAAAAAAAAAHH�



-Ooohh Quasimodo�te quiero, te quierooooooooooooo
��OOOOOOOOOOOOOOOOOOOHHH!!�



Lentamente la mano de Quasimodo hizo que se deslizaran con
suavidad cuerda abajo hasta llegar al suelo. El esfuerzo invertido hab�a sido
demasiado para el campanero, estaba agotado. Megara, tendida boca arriba, se
tocaba para masturbarse mirando los �ltimos momentos de la extenuante sesi�n
sado de Mal�fica y Jafar, los cuales ten�an el cuerpo lleno de marcas y
moratones.



-Hey Pap� Oso, �a quien prefieres de las dos?.



-Eso est� claro chiquillo-respondi� el otro-. A Jane. T� ya
sabes a quien coger.



-Pues vamos a por ellas.



Tomaron caminos distintos mientras uno se acerc� a la pareja
de Tarz�n(el cual estaba casi inconsciente) y otro a la joven hawaiana.



-Eh Jane, �te apetece pasar un rato con un marchoso como yo?.



-Claro que s� Baloo, me apetece mucho.



-�Y t� Lilo, quieres venirte conmigo?.



-Por supuesto Mowgli.



-�Y no tendr� problemas con tu hermana Nani?.



-Ella no est� aqu� para protestar. Le puse tranquilizantes en
el agua que se bebi� antes de irse a dormir.



Sorprendido por aquello, Mowgli entendi� perfectamente que
despu�s de tantas veces que Nani la hab�a prohibido asistir a estas fiestas,
Lilo estaba ansiosa por participar en una. "Muy bien-pens�-, si eso es lo que
quiere, eso es lo que tendr�". Mowgli la desnud� sin mucha dificultad, la sent�
sobre sus rodillas, la acerc� para apretarla contra �l y la bes� en la boca,
ense��ndola lo que era besar. Lilo se encontraba en el cielo, pues siendo una
ni�a, nadie hab�a querido estar con ella hasta ahora. �Qu� mejor para iniciarse,
siendo una ni�a, que con otro ni�o?. Por su parte, Jane ya estaba m�s salida que
una esquina de rodillas en el suelo, mamando la pija de Pap� Oso. La cabeza iba
arriba y abajo, tragando y sacando, tragando y sacando, moj�ndola con la lengua,
empap�ndola, sujet�ndola con la mano para asegurar la erecci�n�mientras las
manos de Lilo recorr�an como locas el cuerpo del ni�o de la jungla, deseando
tenerlo dentro suyo lo antes posible.



-Uuuuuuuufff�si sigues as� voy a acabar atragant�ndote con mi
semen Jane�no sigas tan fuerte�un poco m�s suaveeeeeeee�



-No puedo, �no puedo!...quiero este garrote, lo adoro�despu�s
de ver como destrozabas a Pocahontas y Blancanieves, la quiero para m�la quiero
toda�



Baloo no pod�a contenerse las ganas de montarla en su regazo
y empalarla hasta sac�rsela por la boca, pero deb�a esperar a que ella terminase
de hacerle aquella monumental felaci�n que ya estaba convirti�ndose en una
se�ora paja. Queriendo imitarla, Lilo se inclin� de rodillas, sac� la verga de
Mowgli de su calz�n y con la mano la hizo endurecerse a base de movimiento
"arriba abajo" que le ve�a hacer a Jane. Mowgli esboz� una sonrisa de picard�a
al ver las ansias de la ni�a por aprender a jugar a cosas de mayores, por lo que
la puso abierta de piernas, para as� poner la cabeza entre ellas.



-Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaahh�aaaaahh haaaaahh aaaaaaahh
aaaaaahh�me gusta Mowgli, me gusta lo que me haces�



-Pues a�n te queda mucho por disfrutar�vas a subir al cielo�



Jane ya no pod�a esperar m�s, ni siquiera a que Baloo probara
los abundantes jugos que le manaban de entre las piernas. Lo hizo sentarse con
las piernas abiertas, se puso de espaldas a �l, sujet� con las manos su poll�n y
se lo fue clavando lentamente en sus entra�as. Su tama�o provocaba que le
doliera, pero era un dolor maravilloso. Baloo puso sus manos en su culo, las
pas� a las caderas, una de ellas subi� hasta cogerle una teta con la que jugar,
y disfrut� de ver que ella estaba cabalg�ndolo. Jane estaba perdida en su mundo
de placer, gozando de percibir como aquella tranca entraba de su vulva, luego
sal�a, luego volv�a a entrar, sintiendo como la llenaba por dentro. Kida ve�a
toda aquella escena con los ojos como platos. Tras haberse pasado por la piedra
a Jasmine, Aladino y Golfo(que despu�s de Wendy anhelaba poseer a otra humana),
se encontraba algo cansada, pero a�n quer�a algo m�s, de modo que se acerc� a
alguien que hab�a tenido poca actividad durante la noche, casi nula.



-�Es que no tienes ganas de follar como los dem�s?, �no te
apetece?.



�l le dirigi� una mirada de soslayo con mucho desprecio.



-Pues tenerme a m�, y no solo eso: si quieres puedes forzarme
como te plazca. Necesito una enorme polla que me reviente a lo bestia, y s� que
t� puedes.



-�De veras-pregunt� con un toque de incredulidad-?.



-De veras. Solo cuando me revientan llego al l�mite de mis
fuerzas y solo entonces gozo plenamente.



Skar ni siquiera contest�, si no que se limit� a ponerse en
posici�n y de inmediato la obligo a agacharse y a chup�rsela. Sirvi�ndose de las
patas ten�a la cabeza de Kida bien agarrada para que no pudiera sac�rsela de la
boca, y ella empezaba a disfrutar de aquella sensaci�n de vejaci�n. A su vez,
Jane ya estaba botando sobre Baloo como una loca, chorreando de forma copiosa
sobre �ste, y Mowgli, tras preparar a Lilo para su desvirgaci�n, se puso encima
de ella.



-Esto�va a doler.



A pesar del trabajo oral que hab�a hecho, costaba meterla,
pero no desisti� de su empe�o sabiendo como sab�a que Lilo deseaba que alguien
la hiciera el amor. Sus esfuerzos se vieron recompensados cuando, al tercer
intento, lo consigui�.



-��AAAAAAAAA AAAAAAAAAAAAHH!!...��NOOOOOOOOO!!, ��ME
DUELEEEEEEEE EEEEEEEEEEEEEE!!...



-Tranquila, �tranquilaaaaaaaaaaaa!...pronto pasar�, te lo
prometo�pronto ya no doler� m�s�



Mientras todos abajo estaban disfrutando como locos, en uno
de los dormitorios el joven Milo, al que nunca dijeron nada de las fiestas del
piso de abajo, despert� sobresaltado por una pesadilla. Queriendo beber agua, se
encontr� con que no ten�a en su cuarto, y al pasar por el cuarto contiguo, vio
que la puerta estaba abierta. Al entrar, se encontr� con Nani, la hermana de
Lilo, profundamente dormida, y tambi�n desnuda. En su mesita de noche hab�a un
sobre y supo que eran tranquilizantes, por lo que ni toda una manada de
elefantes en estampida la despertar�an. Con timidez se acerc� a ella y descorri�
las s�banas, admirando el hermoso cuerpo de ella. Se sonri� con expresi�n
mal�vola, se ech� en la cama y comenz� a acariciarla, besando sus pezones y
lami�ndolos, queriendo ponerlos duros. Nani comenz� a gemir en sue�os sin
despertarse, por lo que la ten�a a su completo dominio. La toc� un poco m�s por
sus tetas y luego desplaz� una mano por su vientre, bajando hasta su pubis
velludo, prepar�ndola para humedecerla a fin de penetrarla, ya que su miembro se
encontraba bien erecto. Se lo restreg� por todos lados, desde la cara hasta la
raja del culo que, si pod�a, pensaba explorar en toda su profundidad. Milo mam�
de aquellas preciosidades coronadas un buen rato, tom�ndose su tiempo, para a
continuaci�n pasar la lengua por ellas, sentir la rugosidad de sus pezones,
bajar por el ombligo y acabar introduci�ndose en su pucha mojada. Durante varios
minutos se dedic� a mojarla totalmente, y cuando ya no pudo m�s, se puso encima
de Nani con su polla apuntando directamente a su rajita.



-Uufff que bien me lo voy a pasar aqu�



Tan mojada estaba que su pene entr� sin problemas,
desliz�ndose a la primera. Nani sigui� gimiendo en sue�os, con Milo viol�ndola y
agarrando con fuerzas sus tetas empitonadas. Mientras tanto, en el piso de abajo
estaban en el caos sexual m�s absoluto: Bella era violada por John Smith, aunque
una parte de ella disfrutaba de aquello y lo celebraba con convulsiones y
gemidos que incentivaban al colonizador ingl�s a consumar la violaci�n hasta el
final; Mowgli y Lilo tambi�n estaban pas�ndolo en grande y tras el primer polvo
que termin� en un fenomenal orgasmo por parte de ambos, ahora ella le estaba
cabalgando a lo loco, sin contar con que Jane estaba al borde de un orgasmo tan
fuerte que por un instante supuso que aquello iba a hacerla explotar.



-Baloooooooooooooooooo�c�rrete Balooooooooooooo�me
corrooooooooo me corrooooooooooooooo�oooooohh oooooohh oooohh oooooooh oooooohh
ooooooohh ��IIIIIAAAAAAAAAAAAA AAAAAAAAAAARRGGHH!!...



Jane explot� con todas sus fuerzas y Baloo tambi�n grit�
mientras derramaba toda su leche ardiente dentro de ella. Cuatro, cinco, seis
chorros salieron para inundarla por dentro y desparramarse por entre sus
piernas. El notar como se le resbalaba era una sensaci�n deliciosa. Mientras
tanto Bella segu�a siendo violada por John Smith, pero no era la primera si no
la segunda, ya que la anterior tambi�n la hab�a violado analmente y casi la
hab�a desgarrado. Ahora estaba desgarrando sus entra�as, aunque despu�s de la
sesi�n con Rey Lui, al que se quiso follar despu�s que �ste lo hiciese con
Aurora, estaba muy dilatada.



-�Como deseaba violarte Bella!, �como deseaba poder met�rtela
a fondo!, �ni Pocahontas es tan ardiente como t�!...Eres una fulana, una ramera
barata�



-Aaaaah aaaaaaaaahh aaaaaaaahh aaaaaaahh aaaaaaahh�me haces
da�o, me est�s mancando mucho�aaaaaaaaayy aaaaaaayy aaaaayy�



-�Calla y goza puerca de mierda!, �por fin puedo
violarteeeeeeeeee!...



Unos pocos empujones m�s y por segunda vez John Smith viol� a
Bella, ech�ndola casi toda la leche por la cara(ya que los primeros chorros
quiso ech�rselos dentro). No era la �nica con la cara manchada: Ariel estaba
igual debido a la leche de Bestia, Esmeralda por la de H�rcules y Jasmine por la
de Peter Pan. Los �nicos que faltaban por gozar estaban pr�ximos al anhelado
momento.



-�Te gusta follar Lilo?, �te gusta cabalgar a un hombre?.



-S�iiiiiiiiiii�me�me gusta muchoooooooo�ahora s� porqu� Nani
gustaba tanto de venir aqu�quiero m�s, m�aaaaaa aaaaaaaaaaaaas�uuuuuuuuummmm
que rico es esto�me chiflaaaaaaaaaaaaa�aaaaaaaahh aaaaaahh aaaaaahh�



-Vamos Lilo, goza conmigo, g�zame bien�ooooohh oooooooohh
ooooohh oooooooohh oooooohh ooooooohh ooooooohh�ya casi est�ya me viene�me
vengoooooooooooooooooo OOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOHH�



-Yo tambi�eeeeeee eeeeeeeeeeeeeen�aaaahh aaaaahh aaaaaaah
aaaaaaaaahh AAAAAAAAAAAA AAAAAAAAAAHH�



Mowgli y Lilo gozaron a la vez entre grande alaridos que
captaron la atenci�n de todos los dem�s. La peque�a hawaiana qued� maravillada
al descubrir todo un mundo nuevo para ella. Todos los dem�s asistentes
aplaudieron la llegada a las Fiestas Nocturnas de la m�s peque�a de la familia,
y ella, entre sonrisas, agradeci� a los dem�s el gesto, yendo luego a ellos para
contarlo lo fabuloso que hab�a sido y lo mucho que deseaba probarlo con todos y
de probar su leche, ya que como ni�o que era Mowgli a�n no pod�a eyacular.



-Vale, vale, ahora estamos cansados-dijo Cenicienta-�creo que
podemos dar por terminada esta fiesta, �no cre�is?.



-Bueno, por m� vale, yo he follado a gusto-repuso Ariel-.



-Yo tambi�n-a�adi� Esmeralda-. He tenido polvos de sobra esta
noche.



-Pero que quede claro que repetiremos lo antes posible,
�verdad?.



-Verdad Bestia-le contest� Pocahontas-, que yo he disfrutado
mucho con Baloo y quiero probar m�s veces la zoofil

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Relato: Lujuria en Disneylandia
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Tiempo de lectura: 40minuto/s





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